viernes, 2 de enero de 2009


Hay llaves que abren puertas, ventanas; salidas. Llaves que te brindan un pasaje a la libertad,un grito a la locura.Pero mi cerrajero se empeña en venderme llaves de candados; que abren y separan caminos, llaves que encadenan , y que me hacen vulnerable a la implacabilidad del destino.

No sé porqué apuesto, si siempre caigo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

si no abres puertas te qedarás en el mismo y aburrido cuarto,cómodo,pero monótono.